CIC Colectivo La silla

CIC Colectivo La silla
Chile

viernes, 31 de julio de 2009

Pedro Arturo Estrada - Colombia



LOCUS SOLUS (Fragmentos)

20

Se disipa tu aliento
en el metal del día,
en su espejo.

La tierra asciende
y resplandece
mujer
curvada y dulce
en el éxtasis blanco,
mientras giras también,
alucinado,
solo,
último niño de la noche
de repente desnudo,
de repente heredero
de todos los vértigos
sobre el oscuro centro
sin bordes,
sin palabras.

Otra vez sin palabras.

21

En las cimas de la desesperación
también el silencio,
la ebriedad del silencio.

En las cimas de la lucidez
también la alegría
de no ser nada.

En las cimas de la soledad
también la risa,
la máscara de la risa.

En las cimas del vacío
la rotundidad de un cuerpo,
el deseo.

En las cimas del deseo
también la rotundidad
de su vacío.

22

Voces del día insidiosas
otra vez te reclaman.
Giras también
y se diría el éxtasis,
la primera mañana,
el vibrante fulgor
de esa palabra.

Déjate llevar como un niño,
te susurra el ángel,
la voz del árbol cercano.

Déjate ir,
asciende también
dicen de arriba.

Pero tú resistes
aferrado al último hilo
de incertitud,

—insalvable.

26

Bienvenida, perfecta irrealidad,
dilución de la certeza en humos angélicos, espejismo,
claridad mutante hacia la tiniebla absoluta.
Bienvenida inconsistencia del tacto, visión dudosa
que nos salvas del dogma,
de creer que creemos.

Bienvenida, refracción íntima de la luz
en el núcleo seroso del cáncer que aniquila
la fe, el confiado vigor del músculo
y el impulso sensual.

Bienvenida, fatiga sabia
que creces y te adensas
tranquila en las arterias.

Amiga que das tiempo
después de todo al tiempo.

27

Ya que permites ir a ninguna parte y al centro
de la nebulosa donde sólo hay silencio.
Ya que dejas reinar en el sancta sanctorum del cuerpo
el vago sol de la náusea, ya que dejas morir sin ruido
ese animal voraz que dentellea bajo la piel: el amor
y todas sus crías deletéreas, ya que asfixias la rabia,
ya que pudres antes que alcancen a brillar
las peligrosas, ambiciosas ensoñaciones del cerebro,
ya que humillas la sangre con la mano invisible
que también agacha los jardines, ya que subes
por los dedos afianzando la música que perderá
los sentidos, ya que doblegas la primera mirada
que busca afuera la salida del laberinto, ya que
nada pueden, nada podemos ante ti,
contra ti,

no dejes libre entonces
ninguna fisura
ninguna herida olvidada

ningún pavor suelto.

***
(Del libro, Poemas de Otra/parte)

Breve reseña biográfica y literaria :
Poeta, narrador, ensayista, coordinador de talleres literarios con niños, jóvenes y adultos. Libros publicados: Poemas en blanco y negro (Universidad de Antioquia, 1994); Fatum (Colección Autores Antioqueños, 2000); Oscura Edad y Otros poemas (Universidad Nacional de Colombia, 2006). Premio Nacional Ciro Mendía (2004) y Sueños de Luciano Pulgar (2006). Poemas y textos suyos han sido recogidos en diversas antologías nacionales y del exterior. Ha editado también algunos libros de manera privada y artesanal.

1 comentario:

Alexa del Coral dijo...

Poesía profunda y bien escrita. Me gusta su aparente desesperanza, su tono ascético y minimalista. Gracias por compartirnos estos poetas.